En esta época del año, donde las familias se reúnen y
comparten vivencias, deseos, momentos y demás, donde los regalos toman el
cariño y lo envuelven para decir a nuestros seres queridos que los amamos, en
donde pensamos en que agradaría a nuestros hijos, madres, padres, hermanos,
compañeros; Yo también incluí en mi lista a Dios y pensé que seria especial
para Él, en que me pediría Él de navidad si pudiera, solo en ese momento el
manual de la vida (La Biblia) me hablo en su escritura y me regalo el siguiente
versículo:
“Si alguno de ustedes
quiere ser mi discípulo, tiene que negarse a si mismo, tome su cruz y sígame.”
Mateo 16: 24 (NVI)
Este versículo me abre los ojos a lo que quiere Dios que
seamos, a lo que el quiere que sea nuestro caminar cuando decidimos ser sus
discípulos. Y hablo de decisión por que
es eso, una decisión, no una obligación; la diferencia entre una decisión y una
obligación es que en la primera yo tengo la opción de decir que no, mientras
que en la segunda me tengo que acoger a lo que se me esta imponiendo. Otra
diferencia entre estos dos conceptos podría ser la libertad, Dios siempre nos
da la libertad de tomar el camino que nosotros consideremos, podríamos decir
que en la mayoría de los casos es el equivocado, solo por que no contamos con
su aprobación, con su consejo, simplemente contamos con nuestro parecer,
nuestra dirección, una que otra vez los consejos de otros que no tienen la
visión del Padre Dios y además nos deslumbramos ante cualquier cosa que brille.
Sin embargo cuando tomamos la decisión de ser sus discípulos
tenemos que tener claro tres premisas o requisitos fundamentales que nos provee
este versículo:
1.
Si ustedes quieren ser mis discípulos, tienen
que olvidarse de hacer su propia voluntad: aunque es muy claro esta frase por
si sola, muchas veces se nos olvida. Lo que el manual de la vida (La Biblia)
que son nuestras instrucciones de cómo debemos vivir, nos quiere decir en esta
frase es que nos abandonemos a su santa voluntad, contemos con Dios para toda
decisión importante, para todo momento, para cada camino que debamos tomar,
para todo; tal vez no siempre vamos a obtener lo que queremos, pero si siempre
vamos a obtener lo que nos conviene de acuerdo al momento de Él, que es
perfecto. Para ilustrar esto mejor siempre me gusta citar el siguiente ejemplo:
es como cuando nosotros tenemos 15 años y queremos un automóvil, entonces vamos
a nuestros padres y se los pedimos; supongamos que nuestros padres tienen
medios suficientes para darnos un automóvil, sin embargo no nos lo dan por que
ellos consideran que no es el momento, que si nos lo dan pues quizá podamos
estrellarnos, así es Dios el solo nos da lo que nos conviene para evitar que
nos estrellemos, debemos dejar que el guie nuestro caminar, que el nos muestre
el propósito para nuestras vidas.
Adicionalmente también significa dejar
nuestra manera egoísta de vivir, preocuparnos por el otro, por el necesitado,
ayudar a nuestros familiares, a nuestra comunidad, negándonos a nosotros mismos
para ser para los demás, esto también hace parte de la voluntad de Dios.
2.
Tienen que estar dispuestos a cargar su cruz:
esta frase la podemos ver en dos dimensiones, la primera la dimensión humana,
esta nos dice que debemos estar dispuestos a aceptar nuestra condición humana,
nuestra condición pecadora, a cargar con nuestras debilidades, tentaciones,
problemas, dolencias, pecado, con nuestra situación por difícil que esta sea, a
cargar con nuestra cruz con la total certeza de que Dios entiende que no somos
perfectos y que además el nos dará
alivio, nos ayudara a cargarla.
La segunda dimensión es la divina, esta ve
a la cruz será como ese camino difícil que nos tocara afrontar por ser
discípulos de Dios. El mundo nos tachara, nos perseguirá, nos tildara de
extraños, pero nosotros debemos estar siempre mirando que de esta manera somos
mejores y nunca perder de vista nuestra meta, una meta que solo entiendes cuando
eres seguidor del creador, esta meta es la Eternidad, entendida como el ese
lugar que vamos cuando dejamos esta vida y entramos en el gozo del Señor.
3.
Seguirme: esto se pude traducir como lo dice la
TLA (Biblia Traducción Lenguaje Actual) hacer lo que Dios nos diga, si, eso es
lo que se hace cuando se sigue a alguien, si no vean los clubs de fans de los
artistas, hacen y copian todo lo que ellos hacen. Están pendientes de sus
palabras, de sus pasos, los buscan a toda hora, van tras de ellos.
Ve ahora y haz lo mismo, ve tras el Señor
tu Dios, persíguelo, aférrate, búscalo. Tenme como tu modelo dice el Señor.
Oración: Señor, ¡ solo
tu me bastas! Nada se puede comparar contigo. Ningún interés que este fuera de
Ti me puede salvar. Hoy renuncio a todo aquello que el mundo me ofrece y me
separa de Ti. Hoy busco tu misericordia que restaura y libera. Te pongo en
primer lugar, en el centro de mi vida y te entrego los anhelos de mi corazón.
Anhelo seguir tus huellas y recorrer solo el camino que me lleva a Ti. Amen