Tal vez hoy, en este momento te digas a ti mismo: por qué tanta
lucha? Porque mi vida es una lucha continua?, no salgo de una y llega otra y
otra, parece no tener fin.
Y déjame decirte querido amigo, pues así es, la vida es una
constante lucha, es un constante esfuerzo, está hecho de momentos en donde
ganamos y celebramos, y otros en donde perdemos y celebramos; dirás que? como? que
dijiste? perdemos y celebramos? Estas loco.
Pues tal vez si estoy loco, o tal vez la palabras claves que usó para celebrar las derrotas son: aprendizaje y oportunidad, debes saber que
“Solo será feliz aquel que asuma la lucha como camino para la realización”
(Linero, Vargas, Bermeo, 2016, p. 77).
Así es, no te asustes, no temas, no vaciles en hacer
sacrificios, en dar la milla extra, en esforzarte una vez más, solo una vez más, si caíste levántate, límpiate y continua, perdiste una lucha pero no la
batalla, esa es la única forma de lograr tu sueños, es la única forma de vivir.
Sin embargo para que estas derrotas tengan sentido o mejor aún para que toda tu batalla tenga sentido, tienes que enfrentar cada lucha de la
vida con los siguientes elementos:
1. El Qué? (Objetivo): debes identificar bien qué es lo que
quieres, plantearte una meta clara, medible, realizable y alcanzable, de lo
contrario si luchas sin saber adonde vas, perderás fuerza, malgastaras recursos
y terminaras tirando la toalla.
Recuerda la frase que dice: “Quien no sabe para donde va,
no llegará a ningún lado”, así que define el Qué, cual es tu propósito o
propósitos y camina hacia allá, el mejor momento para comenzar no es ayer o
mañana, es ahora.
2. El Por Qué? (Motivación): debes tener claro que te impulsa
hacer el Qué, el Por Qué lo haces es fundamental, es tu combustible, tu
motivación, te indicará los beneficios que recibirás al alcanzar tu meta.
Pregúntate: es bueno para mi? es realizador para mi? por
que lo deseas con tanta fuerza? anota todo está y tenlo presente, porque seguramente lo vas a necesitar leer o recordar cuando vengan esos momentos difíciles, esos momentos de pruebas, de derrotas , de sacrificios, allí es
cuando debes recordar tu “ Por Qué”.
3. El Cómo? (El camino): ten presente que la manera o el
camino que transites para alcanzar tu objetivo no puede ser cualquiera, debe
estar recubierto de los valores y elementos que para ti sean importantes, piensalos, no se cuales valores y elementos sean importantes para ti, pero
déjame nombrarte algunos que deben estar presentes en ese camino:
·
Respeto por ti mismo: este entendido como el respeto por
ti, por tu integridad, por tu dignidad, si tu objetivo te arrastra a
desintegrarte a ti mismo, a causarte dolor, debes saber que ese no es tu Cómo.
·
Respeto por los demás: en tu caminar debes respetar a los
demás, no vale la lucha si para ganarla debes pasar por encima de otros, debes
destruir al otro. Tu triunfo no se debe conseguir a cualquier precio, debes conseguirse
desde el respeto a los demás, así será perdurable en el tiempo.
·
Creatividad: elemento fundamental para estar inventando y
creando respuesta a las preguntas de la vida, aquellas preguntas que nos toman
por sorpresa, nos hacen retroceder, pero si nos reinventamos cada vez podremos
encontrar maneras de cómo diríamos popularmente “buscarle la comba al palo” y
seguir.
·
Docilidad al espíritu de Dios: escuchar a Dios como
nuestro guía, escucharlo en las situaciones comunes y diarias, en las melodías,
en las personas, en tu iglesia, en su palabra, en la lectura, en tu corazón.
Dios te habla constantemente, solo debes escuchar, pídele al espíritu Santo te
haga sensible a su voz, créele a tus pensamientos, pero siempre basados en la
verdad, si esos pensamientos dañan a alguien o algo, si no son correctos, si
rompen las normas, si faltan al respeto, no es Dios hablándote, deséchalos.
4 4. Quienes? (Compañeros): nunca luches solo, siempre se
necesitan de los demás para continuar. Esos compañero de lucha que te dan su
generosidad, solidaridad, afecto, amor y ayuda, son indispensables en tus días,
en tu vida. Por un lado debes tener el orgullo de sentirte capaz, pero al mismo
tiempo la humildad suficiente de quien necesita ayuda.
Vive tus luchas, vive tu vida, vive…
Referencias:
Linero, A.,
Vargas, B. & Bermeo, F. (2016). Se Acabo la Espera. Bogotá, Colombia: C&A
Editorial.
Escrito por Diego Mauricio Méndez Torres, Vive tus luchas diarias, 29 de Junio de 2016.